Chick Corea: la historia detrás de la foto
foto: Lino Ventura
«De
todo lo que he visto sobre Corea estos últimos días, la foto que adjunto es la
que más me ha emocionado».
David González, en Facebook
En mi
libro, “Tocar la vida. El músico de jazz: vueltas en torno a una especie en
extinción”, publicado en 2019, cuento cuanto sucedió aquella tarde de un calor sahariano…
“Me
confirmaron la entrevista aquella misma mañana. A las
cuatro estaba en el pabellón esperando la llegada de los artistas para
el sound check (llegaron
tarde, naturalmente). Fui testigo del encuentro
entre los dos viejos amigos, besos y abrazos, y la subsiguiente y siempre
engorrosa prueba de sonido”.
Fue entonces
que el autor de la instantánea, Lino Ventura, sugirió aprovechar la luminosidad
del momento para realizar el posado. Y fue ahí que los protagonistas, tomados
por la cintura, improvisaron su cheek to chick
–se me perdone la broma- venciendo su natural mutua timidez. Testigos privilegiados
fuimos el retratista y quien suscribe, además de algunos miembros de la
organización presentes en el “Mendi”, tan divertidos todos con el cuadro como
los propios protagonistas.
Armando Corea entrevistado por la TV en el camerino.
Volviendo al libro:
“De ahí, a los camerinos, para las entrevistas. Primero Paco, luego Chick, cada uno en su camerino particular; la llamada del periódico, «¿va todo bien, Chema?», «todo bien, salvo que no me ha dado tiempo a comer».
Con esto, que dio comienzo el espectáculo, y ahí
estaba uno
metido en su zulo, escribiendo sin saber lo que escribía, sin tiempo para
darle forma a lo escrito antes en la cabeza. En Madrid estaban
esperándome para meter el artículo en rotativas, «¿te falta mucho, Chema?»,
«estoy dando los últimos retoques...»
No sé cómo, pero lo hice, y aún me dio tiempo a
asistir al encuentro
entre los dos colosos sobre sobre el escenario de Mendizorrotza.
Al día siguiente, la foto de Paco y Chick bailando
un agarrao ocupaba
el área reservada a la «noticia del día» en la portada del periódico. Respiré”.
Todas las fotografías, excepto la señalada, son obra
del autor. Su indiscutible valor testimonial compensa su indiscutible baja
calidad.
Un verdadero placer leerte, Chema. Ayer, el texto dedicado a Powell y hoy , este homenaje fotográfico a este par de fuerzas de la naturaleza. Gracias.
ResponderEliminarQuerido Bernardo. Como ya he dicho en otro comentario anterior al tuyo, disculpa la tardanza en conestarte, pero las nuevas tecnologías no es lo mío (gracias a Dios tengo a mi Sara para socorrerme). Me alegra que te guste lo que vengo publicando y espero no defraudarte en lo que está por venir, que no será poco, te lo garantizo. Como dijo el gran Dexter Gordon, aquí seguiremos mientras el cuerpo aguante (y si no lo dijo él, bien podría haberlo hecho). Un abrazo enorme.
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